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Necesidad de enriquecimiento ambiental

Los gatos, aunque pasen la mayor parte del tiempo tumbados y relajados, el enriquecimiento debe enfocarse a intentar respetar su etograma (Alimentación, juego, aseo, caza, exploración, marcaje y sueño) en su medio ambiente.

Es decir, a que su ambiente le reporte los suficientes estímulos. Los gatos que tienen acceso al exterior no necesitan más estimulación por parte del dueño, el propio ambiente se lo proporciona.

Sin embargo, si no tenemos la suerte de tener un ambiente exterior cerca, tenemos que proporcionarle nosotros mismos esta estimulación necesaria. Los gatos que viven tan solo en el interior de una casa, con mucha frecuencia sufren de un defecto de estimulación, debido al desconocimiento de sus dueños sobre las necesidades básicas de un animal carnívoro cazador y «solitario.

Este provoca multitud de problemas, como depresión, ansiedad, personalidad destructiva, agresividad, depresión, falta de apetito… En cuanto a las relaciones entre humanos y gatos es necesario que los dueños aprendan a interpretar el lenguaje felino.

El enriquecimiento también puede realizarse con la introducción de otro animal no felino, como por ejemplo un perro. La convivencia entre estos animales debe hacerse de forma paulatina, siguiendo unas pautas. Este tipo de contacto debe ser no forzado.

Juegos para el enriquecimiento ambiental

La utilización de determinados juguetes que emulen situaciones de caza les ayudan a mantener el equilibrio físico y mental. Algo fundamental es guardar el juguete tras el periodo de juego para que no pierdan su valor.

Realiza sesiones diarias, breves y regulares, permitiendo que atrape el juguete y dándole un premio de comida final. Aquellos felinos que viven en casas o apartamentos necesitan al menos 30 minutos de juego diario. De esta forma, fomentarás el ejercicio físico y evitarás que tu gato se convierta en un animal sedentario. Pero eso no es todo: cuando los dueños juegan con sus mascotas, se crea un vínculo que nada ni nadie puede romper.

Los juegos de inteligencia

Este tipo de juegos no tienen por qué ser exclusivos de los perros. A nuestros amigos los gatos también les encantan. En el mercado existen diferentes tipos, como los puzzles o construcciones con agujeros.

Consisten en esconder objetos para que nuestros pequeños amigos los encuentren. Será un juego muy divertido para él, pero tú no pararás de reírte viendo como tu gato consigue encontrar su juguete perdido.

El juego de la pelota

Este juego es quizás el que más le guste a nuestro pequeño amigo. Todos tenemos en casa una pelota o algún otro objeto que ruede. Tírala para que tu gato la atrape, ya verás como consigue lanzarla por los aires y pasar mucho tiempo entretenido con su juguete.

Hay muchos tipos de pelotas: con ruido, con plumas o simplemente puedes fabricar una exclusiva para él.

Perseguir la luz

Para este juego solo necesitarás una linterna. Proyecta la luz sobre alguna superficie, como la pared o el suelo. Ya verás cómo la persigue y da vueltas para tratar de alcanzarla. Este juego puede resultar muy divertido no solo para él, sino para ti también.

¡Perseguir el ratón!

En este caso, se necesita un ratón de tela atado a una cuerda. Solo hay que colocar el juguete en algún lugar de la casa y tirar de la cuerda para que se mueva el ratón. De esta manera, despertará el interés de tu gato, que lo perseguirá por toda la casa. También puedes esconder el juguete en un tubo de cartón y hacer que él lo saque.

El juego de la pluma

El juego de la pluma es quizás el más utilizado por los gatos. Para ello, necesitas un palo alargado al que le atas un trozo de cuerda y al final una pluma, aunque puede ser otro objeto como un corcho. Agita el palo para que la pluma se mueva delante de sus ojos, él intentará atraparla. Pero recuerda que al final del juego debes dejar que atrape su presa, de esta manera se sentirá feliz.

La caja con agujeros

En este caso, necesitarás una caja de cartón a la que le harás distintos agujeros, lo suficientemente grandes para que pueda meter sus patas. Después coloca los diferentes juguetes de tu gato, como una pelota, ratón, etc. Tu pequeño felino pasará un divertido rato tratando de atrapar su recompensa. Este juego es muy atractivo para ellos.

La bolsa de las sorpresas

Consiste en colocar alguna de las golosinas preferidas de tu mascota dentro de una bolsa de papel. Tu gato se tirará de inmediato a buscar su tesoro.

Algunos consejos a la hora de jugar con tu gato

En primer lugar, debes tener en cuenta que los juegos de los gatos y de las mascotas en general, no deben fomentar la agresividad ni la competencia. Los gatos son cazadores por naturaleza, por lo que es interesante aprovechar esta conducta para que el gato domesticado corra y persiga sus juguetes. Recuerda que por este motivo les gusta más los que son de menos tamaño, ya que les recuerda a sus presas.

Los gatos suelen jugar en solitario, pero estaría muy bien que sus dueños le dediquen al menos 30 minutos diarios a jugar con sus mascotas. Recuerda que una vez ha terminado el juego, debes retirar de su vista todos los juguetes.

De esta manera aumentará el interés por ellos en su próxima sesión. Cada gato tendrá su juguete o juego favorito. Por eso es tarea del dueño descubrir cuál es el que despierta más interés en su pequeño amigo.

El espacio físico juega un papel fundamental

Debemos diferenciar áreas de descanso, de eliminación, de alimentación y de ejercicio y juego. Cuando un gato se encuentra libre, en situaciones de miedo o estrés huye o se esconde. Por ello, en casa, debemos proporcionarle lugares elevados donde esconderse sea fundamental, ya que les gusta trepar y realizar marcaje con sus uñas.

Son útiles los árboles de gato, las cuerdas, los felpudos, las hamacas, postes trepadores… También es importante la temperatura del suelo. Los gatos prefieren materiales que mantengan la temperatura, como la madera. La higiene es otro aspecto muy importante.

Es importante que tenga su bandeja para realizar sus necesidades. La bandeja deberá estar en un lugar tranquilo y fácil de acceder.